El ambiente ácido del estómago nos ayuda a estar bien.
La naturaleza ha desarrollado un ambiente ácido en el estómago para favorecer dos procesos importantes: la digestión de los alimentos y la destrucción de las bacterias que entran en el organismo junto con los alimentos mismos y con la mucosidad que proviene de las vías respiratorias y que deglutimos constantemente.
Si bloqueamos la producción de ácido clorhídrico, sin que sea necesario, causamos un daño en nuestro organismo.