Durante el sueño, el cuerpo secreta muchas hormonas, como las que modulan el crecimiento corporal (hormona del crecimiento), que regulan el consumo de energía y controlan el metabolismo.
Durante el sueño también se producen el cortisol y algunas hormonas femeninas (folículos estimulantes y luteinizantes, importantes para la reproducción).
El ciclo del sueño influye en la producción de hormonas que afectan el apetito y el peso.
La pérdida de sueño tiene serias implicaciones para el desarrollo de la obesidad y la diabetes de tipo 2.