En el sueño NO REM, las actividades fisiológicas se reducen.
A medida que el sueño se va haciendo más profundo, la actividad cerebral, la respiración y la frecuencia cardíaca son más lentas, y la presión arterial y la temperatura corporal disminuyen.
El sueño NO REM tiene cuatro fases; en la cuarta es aquella en la que el sueño es muy profundo, no hay movimientos rápidos de los ojos y los músculos están completamente relajados.
Si las personas se despiertan durante esta fase, se sienten aturdidas y confundidas durante varios minutos.